Hace algunos años, mi primo Óscar no paraba de hablar acerca de una nueva serie que había visto en televisión. Emocionado, me contaba episodios, citaba frases chistosas y me hablaba de los personajes, que según él, eran los más divertidos que había visto en su vida.
Me hizo prometer que vería la serie, y yo, tal vez un poco intrigado, tal vez un poco harto, decidí cumplir mi promesa y le di una oportunidad.
Mi vida cambió por completo.
A los 14 años ya había inventado el termino bullyng. La edición del diccionario de Larousse 1997 incluía mi foto bajo la definición de "rechazado". Nunca fui muy popular, lamentablemente tampoco invisible. No tenía amigos y era una persona introvertida con los de mi edad.
Llegó la secundaria y tuve a mis primeras amigas, mismas que dejé dos años después porque me mudé de casa.
No hablaré de tercero de secundaria porque me culparían de plagio, es muy parecido a "Precious", me la vivía corriendo con un bote de pollo Kentucky entre los brazos. Podría decir que fue el peor año de mi vida, pero no puedo, ese año vi por primera vez FRIENDS.
Las personas, el amor y las series llegan a tu vida cuando las necesitas, no cuando las quieres. Yo necesitaba creer en la amistad, en la lealtad y que existía una unión no sanguínea o sexual, que podía unir a dos personas.
Veía los capítulos que pasaban en la televisión y encontré las primeras dos temporadas en VHS a tan solo 35 pisos en una tienda del Centro. Me puse al día con el resto de las temporadas gracias a las repeticiones.
Cuando Rachel y Ross se casaron en Las Vegas, ya era el fan número uno de la que es considerada por muchos una de las mejores series de televisión de la historia. Desde luego yo considero que es la mejor.
El día que terminó la serie, organicé una reunión con mis mejores amigos, comimos pizza, tomamos cerveza, vimos el capítulo final y todos guardaron un minuto de silencio cuando terminó la emisión. Al mismo tiempo que una lagrima rodaba sobre mi mejilla, yo me prometí que algún día compartiría departamento con mi mejor amiga o amigo, conocería el set de Friends y tendría todas las temporadas en DVD. (ponerle play a una melodía triste).
Hoy, 20 años después de su primera emisión, 10 años después de su último capítulo y de ver por mínimo 4 veces las serie; puedo decir que he cumplido todas las metas que me propuse aquel día. Vivo con mi mejor amiga, la primera amiga que tuve en la vida; en Marzo viajé a Los Angeles y me tomé una foto en Central Perk; y por supuesto, tengo las 10 temporadas de Friends en 4 ediciones diferentes, es decir, 40 hermosos discos que contienen la serie que cambió mi vida.
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